jueves, 20 de mayo de 2010

Reseña de SUAVES PÉTALOS DE AMOR en Mientras Lees

lunes 17 de mayo de 2010

Reseña y Videoreseña: Suaves Pétalos de Amor
Personajes:
Trama:
Amor:
Acción:
Total:



http://mientras-lees.blogspot.com/2010/05/resena-y-videoresena-suaves-petalos-de.html
Incluye Videoreseña!



Ficha Técnica



Autor: Encarna Magín
Género: Romance
Editorial: Rachel
Primera edición española: 2010
Número de páginas: 521 páginas
ISBN: 978-84-96693-92-0




Esta es la primera novela de esta autora española, que he de decir, me ha sorprendido y divertido, emocionado y hecho rabiar. Desde aquí mi gran enhorabuena a Encarna Magín.

Valleverde es un pueblo especial, lleno de personas amables, un lugar apacible pasa pasar las vacaciones, y allí, está establecida la pequeña comunidad religiosa “Los hijos de la luz”, que con su caridad, hacen brillar el corazón del pueblo.

Pero todo esto, son puras pamplinas para Iván, un constructor sin escrúpulos que tiene en la mente, montar una carretera que atraviese el pueblo, y esa apacible gente, se interpone en su camino. Como una demoledora intentará arrasar con todo a su alcance, y en sus tácticas para desalojar a los pueblerinos, conocerá a Lucía, una dulce y mojigata mujer, perteneciente a “Los hijos de la luz”. Ella será objeto de sus fervientes deseos, le hará desearla como a ninguna otra mujer, y también odiarla, porque Lucía hará cualquier cosa para salvar el alma del pueblo.

Cuando digo cualquier cosa, quiero decir, cualquiera. E Iván aprovechará la oportunidad.

Empezarán un tira y afloja en el que el amor, el cariño, y la pasión, tal vez, terminen entrelazados.

¿Podrá Lucía ablandar el cruel corazón de Iván?

Con un argumento sencillo y tal vez, previsible, empieza esta novela romántica llena de momentos memorables, pasajes muy tiernos, y dos personajes principales fuertes y definidos.

Con las primeras líneas conocemos a Iván Mayes, el constructor sin escrúpulos, que nos dejará pasmado con su arrolladora personalidad. Iván es un hombre caracterizado por su fuerza, por su pasión, por su decisión. Si algo que quiere se le cruza entre ceja y ceja, lo tiene y ya está. No está acostumbrado a las negativas.

Seductor y un gran amante, conocerá a Lucía, y querrá desde el primer momento, morder la fruta prohibida.

Lucía es como una niña, se ha criado en un círculo lleno de amor y bondad y cuando se ve de frente con la realidad, no puede evitar sufrir las consecuencias de su inocencia. Además, justo tuvo que encontrarse al ser más egocéntrico y despiadado de todos.

Estos son los dos personajes principales que nos enseñaran que las barreras son realmente franqueables si se tiene amor. Cualquier distancia será recorrida con este fuerte sentimiento, y ni creencias religiosas, ni ambición y dinero, son capaces de ponerle freno a este fenómeno.

La evolución de los dos, es asombrosa, por un lado tenemos a Iván, que comenzará a usar el cuerpo de Lucía como si fuera un simple juguete, una muñeca sin corazón, que se verá iluminado, poco a poco al principio, y fuertemente al final, por una luz desde su interior. Este personaje, que se caracteriza por su falta de sentimientos, por ser un verdadero villano, se convierte poco a poco en un hombre mejor.

Encarna Magín ha sabido darle vida a Iván desde lo más hondo, hasta en los pequeños detalles. Me he creído a su personaje de los pies a la cabeza, y en vez de caerme mal, me ha encantado. Por supuesto, no me he sentido identificado, pero no dudo que existan personas así.

Lucía Olmos, verá como su vida se convierte en cenizas, y se convertirá en una mujer más dura, más real y palpable. Y seremos testigos de una situación muy triste, como es que un alma pura se vea corrompida por la maldad.

Esa maldad es Iván, desde luego.

Tal vez al principio, uno piensa en que “pobrecita”, que ha tenido que cruzarse con ese patán y que ojalá no lo hubiera conocido nunca. Pero finalmente, su relación llega a confines insospechados, luchando contra todo mal, y emocionando al lector.

Me ha gustado, ha sido una novela romántica, dulce y apasionada.

Las escenas de sexo son sublimes, seguro que más de uno sudará y empezará a suspirar con ellas. Sexo puro y duro por muchas páginas, y luego… ¿tal vez amor?

Los personajes están todos bien definidos, también los secundarios; todos en sus papeles, listos para intervenir y cambiar el rumbo de la historia.

Una novela sencilla y a la vez, única, muy recomendable para lectores que busquen amor en grandes cantidades con toquecillos picantes. Es de verdad, un desperdicio si la dejáis escapar.

Lo único que no me ha gustado, es el título, que lo he encontrado demasiado largo, pero igualmente, no me imagino a la novela con otro nombre.

La narración es fluida y en todo momento te ves incluido en la historia, como si estuvieras allí mismo, presenciando escenas intimas y discusiones entre los protagonistas. Te involucras personalmente con ellos y te ves afectado con sus reacciones, impotente al principio, cuando la relación entre Iván y Lucía es tan devastadora, y emocionado cuando sus corazones empiezan a despertar.

Definitivamente, una novela hermosa y bien trabajada, un primer trabajo de Encarna Magín magnífico.

Suave y tersa como un pétalo, esta novela no puede faltar en ninguna estantería romántica que se precie.

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