domingo, 16 de mayo de 2010

Crónica de la presentación de SIN REMISIÓN




Ayer fue un día muy especial. Admito que todavía acuso el estado nervioso que me acompañó durante toda la jornada, pero, aun así, no solo no lo cambiaría por nada, sino que, además, quedará grabado en mi memoria como un recuerdo indeleble.
Sobre las seis de la tarde llegué junto con mi marido a La Casa del Libro, y creo que justo en ese momento comencé a alucinar y a decirme a mí misma que aquello era una realidad, un sueño que al fin había cobrado vida: en la puerta de entrada había un cartel anunciando la presentación de mi novela, nada extraño por otra parte, pero que me hizo mucha ilusión.
Conocí a Lorena Cabo (la autora Lena Valenti) responsable de organizar el evento e, instantáneamente, me sentí como en mi casa.
Gracias Lorena por el cariño y el cuidado que pusiste en organizarlo todo.
Al poco tiempo apareció Jezz Burning y, tras un café y una charla sobre todo y nada, tomamos asiento y la presentación comenzó.
Gracias Jezz por acompañarme, por tu buen hacer, tu amistad y tu cariño.
A continuación transcribo íntegra y literalmente el discurso de Jezz y lo hago por la sencilla razón de que no solo destila la profesionalidad que la caracteriza, sino también, porque creo que realizó un análisis tan detallado y exacto que ni yo misma podría haberlo hecho mejor:
"Si hace cuatro años me hubieran dicho que hoy estaría aquí presentando el libro de esta gran autora y amiga, sencillamente me hubiera muerto de risa en la cara de quién fuera. Sin embargo, mi presencia es la prueba de los inquietantes designios que nos guarda el futuro a cada uno de nosotros. Negarse a aceptarlos es como querer luchar contra la furia de los elementos pues, probablemente, si le hubiera dicho que no a Rosana, me hubiera quemado viva en los fuegos del infierno.
Cuando la conocí, allá por el Sant Jordi de 2008, me llevé conmigo la certeza de haber conocido a una mujer extraordinaria. Rosana no es una persona de grandes aspavientos. Es serena, firme en sus convicciones y tremendamente sincera. De aquellas que con sólo mirarla a los ojos tienes la total seguridad de que jamás te traicionará. Sin embargo, tampoco es dada a explicaciones sobre sus actos. Y, si hay algo que la mayor parte de las veces concuerda con este tipo de personas, es que guardan en su interior una vida rica en experiencia y sabiduría.
Sabía ya entonces de su inclinación por la escritura, aunque debido a su naturaleza celosa de lo íntimo no lo había compartido aún con casi nadie. No sé si tuve algo que ver para que esa idea, de guardar secretamente sus letras, cambiara. Pero si es así, me alegro tanto que aquí estoy, dispuesta a hacer algo que jamás antes he hecho y que siento como una responsabilidad tremenda, pues si unimos al cariño de amiga y compañera de fatigas literarias, el conocimiento de que esta es una tarde muy importante en la vida de un autor, la tarea se presenta más cruenta que la lidia de un miura. Por eso, quiero pedir a todos su benevolencia para el posterior juicio desde ahora mismo, apelando a la necesidad de seguir viva mañana para coger un vuelo a Madrid que ya está pagado!!
Bien, creo que lo mejor es que les hable de la obra que presentamos, cuya autoría le debemos a Rosana: "Sin remisión".
"Sin remisión" está catalogada y ha sido editada bajo el género de "romántica erótica". Como bien sabe ella, es duro bregar con el sentimiento instintivo de rechazo del lector que desconoce el género. Aquel que lo conoce, simplemente sabe que se va a encontrar con una lectura interesante, amena, con una trama donde se conjugan emociones, sentimientos y acciones, así como una historia de amor.
Pero contra todo pronóstico o idea preconcebida, Rosana Briel nos muestra una obra cruda por su realismo, dura por el obstáculo sicológico o moral que plantea a sus protagonistas y sin embargo, llena de humanidad, de emociones desconcertantes y reveladoras además de una buena dosis de profundos sentimientos.
Nunca he sido una lectora asidua a este género, el erótico, sencillamente porque de las obras leídas ninguna ha conseguido hacerme pensar, recapacitar o plantearme cuestiones. Rosana Briel lo ha conseguido, ¿cómo?
"Sin remisión" toca un tema poco conocido como es la Dominación/Sumisión con un tacto y una sensibilidad extraordinaria. Paradójicamente a lo que se pueda pensar antes de enfrentarse a una lectura de esta temática, esta obra está redactada con elegancia pero sin caer en florituras obsoletas, llamando a las cosas por su nombre, pero jamás cayendo en la ordinariez.
Con desenvoltura y sin medias tintas, a través de sus personajes, Rosana Briel nos explica las bases de una relación entre un "Dómine" y una "Sumisa". Nos abre las puertas a una tendencia sexual sobre la que la mayor parte de los, como Noel nos llama, "Vainillas", no tenemos ni idea. A diferencia de lo que uno imagina, es la persona que ofrece la sumisión quién tiene en su mano el poder de aquel a quién otorga la posición elevada. Aprendemos que un Dómine extrae su placer de esa sumisión y que si el Sumiso no permite esa dominación, no hay placer para el Dominador.
Pero ¿qué ocurre si extrapolamos esos papeles a los sentimientos? ¿Qué pasa cuando el Sumiso es a la vez el Dominante a nivel emocional? De la mano de Noel y Mar encontramos esas respuestas.
Noel, es un hombre joven de 35 años, su autora lo describe de la siguiente manera:
"Aquel impresionante par de oscuros ojos azules contrastaban perfectamente con el rostro moreno y el liso pelo negro, tan corto que parecía mantenerse de punta en la parte alta de la cabeza sin necesidad de productos artificiales. Bajo la luz de los pequeños focos del techo, brillaba como satén negro mientras las facciones, como esculpidas bajo las manos de un amoroso artista, eran tremendamente varoniles. La nariz recta, cincelada milímetro a milímetro como una preciosa obra de arte y los labios perfectamente delineados y generosos le conferían un aire de feroz sensualidad. Pertenecía a ese grupo de escasos hombres incapaces de pasar desapercibidos por el aura de masculinidad que arrastraban a su paso..."
Tiene además una forma peculiar de concebir el amor, dice que: "es un sentimiento con la facultad de destruir a quién lo da y a quién lo recibe", añadiendo que no lo necesita en su vida.
Conoce a Mar, una mujer de 34 años, de ojos verde intenso y un cuerpo de infarto, independiente y huérfana quién asegura que: "El amor es un maldito brujo traicionero. Pero siempre se puede olvidar, sólo hace falta tener voluntad".
Con estas premisas nadie les auguraría un final feliz ¿no es cierto?
Ambos creen controlar todo cuanto ocurre en sus vidas. Ambos tienen la absoluta seguridad de que viven su realidad tal como desean y que no hay opción posible que les otorgue mayor felicidad y estabilidad. Pero aquí está de nuevo el traicionero designio del destino, acompañado esta vez de esa poderosa química que produce la atracción sexual inmediata entre ambos, mientras bailan un suave bolero que ellos sienten en sus entrañas como... uff mejor os doy una muestra de la pluma de su autora:
"Noel, la estrechó contra su torso aplastándole los senos y salió del hueco de su cuello para mirarla a los ojos. Sus alientos se mezclaron con ese gesto y Mar inhaló el aroma salvaje de la piel limpia y sin artificios que le alteró los sentidos, mientras las manos de Noel cortejaban su cintura y sentía cómo una corriente vibrante le subía desde los pies.
-¿Sabías que el baile es la expresión vertical de un deseo horizontal? -susurró Noel muy cerca de su boca".

Tras este encuentro Rosana Briel nos va desgranando con maestría y habilidad, una historia de amor entre estos personajes dotados de carácter, sin que en ningún momento decaiga el ritmo narrativo ni el interés del lector. Nos convertirá en cómplices de esta pareja joven y nos hará desear que ambos obtengan aquello que anhelan. Nos aminará a luchar codo con codo frente a aquel que representa la perversión y el sadismo incontrolado.
Barcelona, ciudad donde se desarrolla la historia, nuestra preciosa y querida ciudad, es como sabéis la que da cabida cada año al Festival Erótico, así que no es de extrañar que de ella naciera también la autora que, sin ningún género de dudas, nos brindará muchísimas más historias con la calidad, la dedicación y el talento que derrocha "Sin remisión".

Tras esta introducción, Jezz me cedió la palabra. Poco más podía añadir que no hubiera dicho ella, por lo que tras una breve disertación, llegamos al turno de las preguntas.
Esta parte me encantó ya que no se desarrolló en un "tú preguntas y yo respondo" sino que generó un debate donde una parte importante de los asistentes participó de forma activa intercambiando opiniones, manifestando una serie de inquietudes, etc.
La presentación finalizó y yo me llevé la impresión de haber calado de algún modo en aquellas personas dejando un trocito de mí en sus corazones.
Gracias a los familiares, amig@s y a los desconocidos que asistieron al acto.
Fue absolutamente maravilloso.

Rosana Briel

8 comentarios:

  1. Me alegro mucho, Menchu.
    Felicidades

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  2. Perdón, quise decir Rosanna ¡¡¡
    Jajaja... me lié con el libro de Menchu.

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  3. Enhorabuena Rosana! vaya pedazo de presentación!!! de lujo!!

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  4. Felicidades guapetona ¡Te lo mereces! Ojalá vendas mucho...mucho...muchísimooooooooo
    Besos

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  5. Felicidades por el gran éxito de la presentación, Rosana.

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  6. Muchísimas felicidades, Rosana, ya te lo he dicho también en tu blog, la novela es preciosa!!!!

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  7. Una presentación estupenda, felicidades Rosana por una historia tan diferente y tan bonita. Besos, Ana.

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  8. Rosana ha sido una magnífica presentación. Debes estar contenta y muy orgullosa.
    Muchísimas feliciades u un beso.

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